Sin importar el nombre de nuestra profesión, aquellos que buscamos ayudar a otras personas a resolver o superar algún conflicto nos hemos encontrado con clientes que no tienen una idea de por dónde empezar a contarnos su conflicto o incluso no lo tienen claramente identificado.
Sin embargo, como agentes de cambio, sabemos que es importante que la persona pueda identificar el conflicto y comprometerse con el cambio independientemente de lo que nuestra terapia o técnica le aporte.
A lo largo de mis años de formación y práctica como coach ontológico he aprendido algunas distinciones que me ayudan a generar un espacio o contexto de aprendizaje para guiar al cliente en un proceso transformacional, donde a través de la escucha , las preguntas, la identificación de juicios, emociones y el diseño efectivo de objetivos, el cliente pueda darse cuenta de algo nuevo, lograr un aprendizaje, diseñar acciones concretas y comprometerse con su propio cambio.
En esta oportunidad, lejos de meternos a fondo en lo que lleva una formación en coaching ontológico, quiero traerte conceptos y reflexiones para profundizar e incorporar en tu práctica diaria junto a un modelo de conversación que te acerque a ese objetivo.
Estoy convencido que estas herramientas y recursos te ayudarán a darle una estructura lingüística a tu profesión para expandir tu posibilidad de acción y en consecuencia la de tu cliente.
Este curso tiene la dinamica de una formación online llevada a cabo durante 4 encuentros y que guarda un monton de material para la reflexión como asi tambien el trabajo sobre material audio-visual que permiten incorporar nuevas formas de pensar y abordar los conflictos que transitamos diariamente.